Vapor y temperatura

En Parramon Exportap, hemos implementado un meticuloso proceso conocido como «Vapor y Temperatura» en nuestro proceso productivo, diseñado específicamente para garantizar la calidad y pureza de nuestros tapones de corcho. Este proceso tiene como principal objetivo eliminar los elementos volátiles, como el TCA (tricloroanisol), que pueden estar presentes en los tapones y afectar negativamente la calidad del vino.

Proceso de vapor y temperatura para tapones de corcho

El procedimiento comienza con la inyección de vapor seco en la cámara de tratamiento. Este vapor no es común, ha sido recalentado previamente para asegurar su eficacia en el proceso. Al introducir el vapor seco por la parte inferior de la cámara, se genera una circulación ascendente del mismo. Esta circulación es esencial, ya que a medida que el vapor se desplaza hacia arriba, entra en contacto directo con los tapones de corcho, penetrando en sus poros y eliminando los elementos volátiles que puedan contener. Unos potentes extractores se ocupan de extraer los volátiles de la sala.

La eficacia de este proceso se ve potenciada por la temperatura a la que se lleva a cabo. Mantenemos la cámara a una temperatura constante de 114 grados Celsius. Esta temperatura específica, combinada con la circulación del vapor seco recalentado, garantiza la eliminación óptima de los compuestos indeseables, dejando los tapones de corcho libres de contaminantes y listos para ser utilizados en el embotellado de vinos de alta calidad.

En resumen, nuestro proceso de «vapor y temperatura» no solo refleja nuestro compromiso con la excelencia, sino que también es un testimonio de nuestra dedicación para proporcionar a nuestros clientes tapones de corcho de la más alta pureza y calidad.